El día no podía ser mas perfecto, no existía una sola nube en el cielo, circulaba un aire tibio sobre la ciudad, las puertas de aquella Iglesia de San Juan estaban abiertas de par en par como esperando su llegada, no era de contrariar que Raul suspirará fuertemente y hiciera una pequeña mueca. Su mejor amigo se casaba, encontró un pequeño lugar donde estacionar su automóvil entre un Seat y un Renault aún con su pesar estaba decidido a acompañar a uno de sus mejores amigos de su infancia en su boda. Para el no era sencillo ir a una boda, puesto que su credo era "No me caso ni me comprometo" por eso y por mas ideologías había perdido a muchas chicas que habían y habrían dado lo mejor de ellas para complacer y vivir a su lado.
- ¿De que parte viene? - dijo un tipo de la misma edad de Raul
- De parte de Manuel, ¿Por qué la pregunta? - respondió Raul, sin mas afán.
- ¿Eres Rulo? - Acercandose a él el tipo igual de traje pero obviamente Raul se dio cuenta que su traje no le quedaba, la corbata no la tenía a la perfección y su camisa era un poco vieja.
- Si - dijo Raul un poco tratando de recordar la cara y saliendo del carro - Disculpa ¿quien eres?, es que hace tanto tiempo que no he visitado a Manuel que no recuerdo si te conozco -
- Por dios con apenas unos pocos pesos de mas y te olvidas de los amigos, soy Hugo! - En su cara salió una sonrisa, acompañado de un fuerte abrazo - cuentame, ¿Cómo te ha ido? -
- Excelente, trabajando mucho y tratando de sobrevivir - dijo Raul naturalmente
- Pues parece que andas descalzo, o no mi rulo? - exclamaba Hugo viendo el Audi R-8 en el que había llegado Raul - Mira te presento a mi novia Nancy - saludando de un estrechón de mano muy delicado, Nancy era una mujercita un poco rellena chaparrita y blanca con pocas pecas en su rostro y una sonrisa que destilaba ternura. - Que esperamos, Manolo no tarda en llegar - dijo Hugo mientras abrazaba a Raul y con la otra mano caminaba con su pequeña novia.
- Si vamos - Raul estaba en otro territorio un territorio que hace años había dejado atrás y sobre todo quería olvidar pues le traía recuerdos de escasez y limitaciones.
- ¿Tienes pareja, Raul? - pregunto Nancy apenas haciendose notar.
Sonrojandose un poco Raul - No, salgo con alguien desde hace años una diseñadora, pero la verdad no me gusta poner títulos a las relaciones - respondiendole amablemente.
Entre preguntas curiosas y respuestas obligadas de parte de Hugo y Raul, siguieron caminando los cincuenta metros que los dividían de la casa del señor. En la pequeña entrada de la iglesia, Raul reconoció o mas bien Hugo le ayudo a recordar los nombres de las personas y de donde se conocían, veía otro mundo ahí, un mundo mas fraternal, donde los diseñadores, y las prendas de marca no estaban invitadas, hasta cierto punto se sentía incomodo por la forma en que iban algunos vestidos, no era tanto el presumir en que carro venías o de quien era el traje o cuanto costo el vestido, puesto que vio que el "Oso" un tipo que cuando era niño siempre lo golpeaba iba de jeans y una camisa del Real Madrid, a Victor un amigo con quien jugaba football con un pantalón formal y un polo "Lacoste" amarillo. Pero sobre todo se dio cuenta de algo lo que realmente importaba era la presencia el dar las bendiciones por la futura pareja y sobre todo compartir la alegría de dos personas que llevaban mas de diez años de noviazgo.
Al fin llego Manuel, traje de lino blanco, mocazzin caqui, corbata caqui y camisa del mismo color hueso del traje, el contraste con la piel azabache de Manuel era evidente pero a decir verdad se veía bien, se veía feliz y no paraba de saludar, abrazarse y observar a todos, a los pocos minutos llego la novia, el vestido era totalmente blanco con una pequeña cola de un metro que arrastraba por las recién lavadas escaleras. Raul no decidió saludar a Manuel en ese momento, por que era su día y pensó mejor ser un observador de la felicidad de su viejo amigo.
El padre no tardo mucho en invitar a todos a pasar y hablar unos minutos con los novios, a los pocos minutos entro se vio entrar a Manuel y su novia Angelica por el pasillo central, fue ahí que Manuel vio a Raul y sonrío con esas sonrisas que destellan felicidad, Raul le devolvió la sonrisa y le guiño un ojo, en ese momento recordó el día en que su amigo conoció a la que en unos minutos sería su esposa. La misa duró lo que tenía que durar, Raul se persigno después de muchos años de no hacerlo y hasta cierto punto se sintió bien con el mismo por lo que estaba haciendo.
- Gracias por invitarme Manolo - mientras abrazaba a su viejo amigo
- No te preocupes, no podías faltar tengo pocos amigos y dentro de ellos estas tú - le dijo Manuel mientras seguían abrazados - pero te mande dos boletos y solo vienes tú, ¿Que paso Rulo? - Manuel sabía como sacarle una sonrisa a Raul
- Si, recuerdas que te conté de Anahí - Manuel acertaba con la cabeza - pues discutimos hace unos días y... -
- No te preocupes, si te ama y la amas... terminarán juntos - Manuel era como un oráculo. Manuel siguió saludando y dejandose abrazar por todos los invitados.
Como es costumbre todos se subieron a sus autos e hicieron una fila, para seguir el carro donde estarían los novios entre pitidos y gritos de algunas damas de honor... "¿Donde estás, no sé nada de ti?" escribió y se lo envió a Anahí en el pequeño intermedio que daba el carro de honor para que los demás se pusieran atrás suyo. Varios de los invitados veían el carro de Raul, pero no podían ver quien lo manejaba, hasta un niño se paro a lado suyo y su padre le tomo una foto con su celular, hasta que el carro un Chevrolet 58 que era el principal, arrancó dirigiendonos hasta el que sería el lugar donde pasarían el resto de la velada.
En el Jardín, ya esperaban algunos invitados entre ellos el amigo que faltaba Osvaldo y su pequeña prometida Isabel, ellos eran la viva voz del el amor es ciego, él alto, fornido, cara de pocos amigos, pero con un corazón enorme, ella menuda, chaparrita, con esos ojos que solo dicen quiero hacer mas amigos y la lastimosa voz de niña. Osvaldo e Isabel ya estaban sentados en la mesa de los amigos del novio, junto a Osam otro de los pocos amigos de Manuel y quien fuera compañero de tantas peleas contra otros barrios. Todos ellos seguían frecuentandose y compartiendo sus relaciones con carnes asadas, salidas a antros, bares y paseos a pueblos cercanos, cosa que Raul aunque fue invitado a todas sin excepción, jamás fue por equis o ye razones o simplemente por que no quiso ir, dejandolos esperando, pero como fieles amigos que eran en ninguna lo dejaron de invitar.
Raul se parquéo para dejar su carro en el valet y solo bajando con el una pequeña caja de regalos y su abrigo aunque lo dudo y lo volvió a dejar en el automóvil, no claro diciendole al chico de no mas de 20 años que si lo requiriece le llamaría para que se lo llevará personalmente a la mesa donde estaría. "Solo dime, estas con él, verdad. Te dejo no quiero interrumpir" volvió a enviarlo a la misma persona, cuando volteó guardando su celular en su saco, se dio cuenta que mas de una de las invitadas ya le estaba sonriendo. Como era su costumbre Raul se puso sus lentes, su sombrero y sin hacer mas, busco a Hugo y Nancy para entrar con ellos. Hugo cargaba una caja de considerable tamaño para darsela a Manuel.
- ¿Por que tan pequeño es tu regalo? - Pregunto Nancy
- Las mejores cosas de la vida vienen en envases pequeños - le respondió Raul, los tres rieron, siguiendo la fila de invitados.
Entraron al pequeño jardín. El organizador estaba con su acompañante en la entrada, preguntando nombres y diciendo en que mesa irían.
- Nombres, por favor - dijo el organizador
- Hugo Gonzalez y Raul de la Roca, Raul de la Roca y Hugo Gonzalez - respondían al unisono. - ¡Se ve que son amigos! - riendose Nancy de la coincidencia del tiempo de respuesta.
- Mesa 3 señores, ¡bienvenidos! - riendose el asistente del organizador
- ¿Puedes dejar esto a la mesa de los obsequios? - le dijo Raul al asistente en forma de mando que el mismo asistente solo pudo decir "sí" sin ninguna objeción. - Así caminamos mas tranquilos, ¿No Hugo? -
- Si has cambiado Raul y mucho - repuso Hugo - Mira ahí esta el gordo e Isa, supongo que nos toca sentarnos con ellos - como tratando de cambiar el tema rápidamente.
Para llegar a la mesa no tenían que caminar mucho estaba a una mesa de la de los novios del lado derecho en frente de la pista de baile y detrás de ellos había una enorme cascada como fondo.
- ¿Cómo has estado? - levantadonse y abrazando con bastante fuerza Osvaldo a Raul.
- Bien, muy bien y tú - respondió con el poco aliento que le sobro Raul
- Excelente, mejor que nunca y con mi vida - señalando a Isabel que estaba saludando a Nancy y a Hugo - no podría estar mejor ¿y tú con quien vienes?, ¿Supe que terminaste con la actriz? - se daba a entender que lo decía por el físico y por la fama de la actriz.
- Si, simplemente no se dio y ya, después del Super Bowl que la pasamos en casa, como que cambio y nuestras prioridades con ella - decía Raul - además acá entre nos, no era muy buena - se reía Raul y Osvaldo igual al entenderle.
- ¿Y ahora con quien sales? un tipo como tú no anda solo, aunque te diré que ese día en tú casa, me agrado mucho, jamás pensé que fuera tan sencilla - le preguntaba Isabel mientras le tomaba la mano para que la saludará.
- Isa!, ¿Cómo estas?, creo que desde ese día que no nos vemos, solo por facebook, pero jamás coincidimos y eso que trabajas a dos calles de donde vivo!, sé que Osvaldo no se encelaría si salimos a comer, ¿o sí? - Raul diciendolo fuerte para que Osvaldo escuchará.
- Obvio no me molestaría pero preferiría que no, conozco tus antecedentes Raul - Decía Osvaldo mientras tomaba un sorbo de su paloma.
- Jamás, Osvaldo si no es contigo, no - respondío Raul - Y ando o no o quizás o no sé la verdad con una diseñadora de modas, pero se disgusto por algo y prefirió no venir.
- Oh, entiendo! - Finalizo Isabel
Entre Palomas, coronas y platicas de todo tipo, de la familia, de los planes próximos de Osvaldo e Isabel de boda, el amor nuevo de Hugo con Nancy, el interminable noviazgo de Osam y las presentaciones o peticiones a bailar de las primas o amigas de la novia hacia Raul, impedían tener una conversación normal.
- Esto cansa, no? - diciendo al aire Raul.
- Es por tu carro, tú estas feo - riendose Osvaldo le dijo a Raul
- Si, debe ser por eso - rió Raul "Este es mi último mensaje, sino respondes jamás vuelves a saber y no me molestaré en buscarte mas. Por cierto te amo" y volvió a enviarselo a Anahí.
- Raul, presumele a Hugo a donde has ido - jactandose de su amigo Osvaldo y diciendole a Raul que le había comentado del día que pasaron el super bowl en su casa.
- Jaja, no importa y no tengo nada de que presumir, Hugo podrá hacerlo pronto, ¿Verdad? - lastimosamente humilde le respondía a su amigo.
- No Raul, no tengo esa estrella que tú tienes, pero dinos ¿que les regalaste a Manolo y a Angelica? - querían saber, se morían de ganas por saber.
- ¿Les digo la verdad? - acercandose Osvaldo, Osam y Hugo - ¡No lo sé!, mi asistente lo compró y me lo dejo hoy en la mañana en mi comedor - riendose por que era cierto
- ¿En serio no sabes? - pregunto Osam
- No nene (así le decían desde la infancia a Osam, por su cara de bebe) - Casi nunca lo sé, pero siempre me agradecen. Fue en ese momento cuando escucho la vibración en su saco - ¿Me permiten? Debo contestar - sus amigos asintieron "Hola, también te amo, estoy en casa de Miriam, ¿podemos vernos? Atte. Anahí" Usualmente Raul no respondería o si lo haría sería con algo hiriente... Pero ese día algo sucedió, por primera vez estaba decidido a pedir consejo de quienes tenían éxito en ese ramo, cuando llego Manuel
- ¿Cómo se la están pasando? - preguntando Manuel
- ¡muy bien! - respondió Osam
- Te juro que pense que no vendrías Raul - dijo Manuel
- Jaja, yo también lo dude, pero tengo una duda... - Raul contó rápidamente la vida o la relación que tenía con Anahí y sobre su último mensaje, pidiendoles consejos, en ese entonces Isabel y Nancy ya habían regresado a sus lugares.
- Yo opino que si la amas, la busques - respondió Manuel - Así te tengas que ir de aquí... y creo que si te vas en vez de estar molesto me enorgullecería que también en ese ramo seas exitoso y por fin puedas encontrar el amor verdadero - finalizaba Manuel.
- Pues si el novio en su boda te dio permiso, ¿Que podemos decirte nosotros - decía Isabel tomandole la mano a Osvaldo y dandole un beso - No hay nada mas hermoso que esto, Raul daté la oportunidad de amar, de verdad ¿A que le tienes miedo? - terminando la idea Osvaldo.
- Tienes mas oportunidades de hacer feliz y proporcionarle mas cosas que las que nosotros les damos a nuestras novias, o no Nancy? - le preguntaba Hugo a Nancy - Yo la verdad no te conozco Raul, pero si te gusta y te llena ella como mujer a ti como hombre en todo aspecto ¿que esperas? - decía Nancy
- Si - solo eso fue el comentario de Osam, claramente todos se rieron de eso y armando de valor Raul llamo a Anahí y le dijo "esperame voy para allá. te amo" terminando de decir eso, todos chiflaron y aplaudieron, pues era la primera vez que oían a Raul decir esa palabra. "Te amo".
Tomo sus cosas, se despidió y partió hasta el sur de la ciudad para ver a Anahí.
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