miércoles

Fin del mundo



Estoy en el momento correcto para hablar
de lo que realmente siento en mi lado izquierdo
En cierto sentido, estoy dispuesto a compartir mi libertad
a encadenarme sin esclavitud.

Estoy parado justo en la calle del compromiso
con mi ramo de rosas y mis chocolates en mi mano
esperando el justo momento para que llegue ella
para que discretamente se apoderé de mi ser.

Sinceramente no sé si me pegue en la cabeza
o si simplemente enloqueceré, pero siento que
se aproxima un fantasma loco disfrazado de
mujer.

Parece un juego, pero no lo es parece inútil
pero sé que es real o al menos eso comienzo
a sentir, que a la vuelta de la esquina
se aproxima con un "te quiero" en sus labios.

Me tiemblan las piernas de la emoción
de saber que esta vez saber que será
la decisión correcta, porque sé
que con ella hasta el fin del mundo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No me vengas con rosas, mejor tulipanes